Carla Riva
Una hermana para todos
Nació en la ciudad de Como el 26 de marzo de 1939. es la segunda de cuatro hermanos. en su Italia natal completo sus estudios primarios y secundarios con el título de perito mercantil comenzó a trabajar.
El medio y su propia formación fueron modelando en ella una fuerte vocación religiosa que la llevaron a iniciar el noviciado en la congregación de la Virgen niña de la ciudad de Milán. tenía Apenas 22 años y corría el año 1961.
Dentro de la disciplina que le imponía el noviciado debía optar también por el aprendizaje de una especialidad de servicio, ella eligió el área de la salud. en la misma ciudad de Milán ingreso al instituto escuela profesional de enfermería.
En 1964 hace su primer voto y en 1966 la congregación la destina la Argentina dónde comenzó a prestar servicios en el hospital italiano de Buenos Aires. fue en la pequeña capilla de este hospital dónde realizó el voto Perpetuo.
En 1969 la congregación le da un nuevo destino: era en el Hospital Regional Río Grande, lugar donde estuvo hasta 1977. luego por 5 años continuó su misión en Santa Fe y desde 1982 nuevamente Río Grande donde tuvo a su cargo la jefatura del departamento de enfermería.
Su humildad le impide todo homenaje y reconocimiento que apunte a su ego. la hermana Carla es así: no hace falta contar lo que se hace, dirá sistemáticamente. pero ella seleccionará al personal, diagramará los turnos y guardias y supervisará a los aspectos funcionales y operativos.
Siempre la humildad que no declama, pero si practica la ha llevado en oportunidades a lavar ropa, si falta una mucama, a cortar y coser sábanas y si faltaban en las camas de internación, de asistir en una intervención quirúrgica; sí faltaba una enfermera.
El hospital no puede detenerse, dirá cuando de atenuar el sufrimiento del doliente se trata. se hará tiempo para visitar y asistir aquellos que están internados y la requieren. y unas veces será reconfortando y en otras simplemente Estando.
Goza del reconocimiento de todo el personal del hospital, respeto que nace, sin dudas, en aquello de predicar con el ejemplo; si dadores voluntarios de sangre no respondieron a un llamado radial ella ha dado la suya, para continuar trabajando como si nada. las salidas con la ambulancia a la zona rural para atender emergencias, la encontraron siempre dispuesta para acompañar y hasta ser la primera en bajarse a empujar la ambulancia si se empantanaba en esos caminos de Dios.
A todo esto, Ella solo dirá: …”mi entrega a Dios es entrega el hermano, porque en el veo a Dios “.
¡¡¡La comunidad de Río Grande le dice Gracias hermana Carla!!! gracias por su generosidad!!! Gracias por su inconmensurable grandeza de espíritu y que la virgen siga iluminando su camino.
Escrito por Carlos María Ratier. Del archivo del Museo Virginia Choquintel del Municipio de Rio Grande.
El 8 de julio de 1992 por Decreto Municipal se declara a la Hermana Carla Riva como Ciudadana Ilustre con el Decreto municipal número 345/ 92:
…¨En el 71 aniversario de la ciudad de Río Grande en cuya síntesis enriquecedora están las raíces históricas de nuestra ciudad y dónde es indispensable asumir el reconocimiento de aquellos ciudadanos riograndenses que sobresalieron en su labor realizada en pos de la comunidad y: considerando que existe una deuda aún impaga con aquellos antiguos pobladores de nuestra tierra;
Que por ello es voluntad de este departamento ejecutivo reconocer la abnegada y silenciosa presencia de aquellos ciudadanos que habitan el suelo riograndense;
Que la hermana Carla arriba es un fiel exponente de aquellos hombres y mujeres que silenciosamente han brindado al pueblo de Río Grande, su trabajo activo, su honestidad, su rectitud habiendo sido está una tarea no debidamente reconocida…¨
En el marco del 98 aniversario de la ciudad el l 11 de julio de 2019 la hermana Carla fue reconocida con el Playero Rojizo como personalidad destacada. Le entregaron dicho premio el Vicegobernador Juan Carlos Arcando, el intendente Gustavo Melella, el diputado Martin Pérez y concejales e integrantes del Gabinete Municipal.
Otro homenaje muy emotivo para la hermana Carla es el que le realizo Emilio, propietario de la Panadería ¨La Unión¨ de la ciudad de Tolhuin con la realización de una estatua, que puede ser visitada y fotografiada para toda aquella persona que visite la famosa panadería en el corazón de la isla.