María Elena Diaz

Braille para incluirnos

María Elena nació el 30 de abril del 1978 en la provincia de Córdoba.

Su mamá se llama Rosa Gerónima Piedra y su papá se llamaba Ramón Díaz Chara, fallecido en un accidente vial cuando María Elena tenía tan solo 8 años.

Fue al jardín de la Esc. N 8 Y cursó la primaria en la Esc. N 14. Trayectoria que realizó sin repetir ningún grado.

De chica jugaba al handball en su colegio y practicaba gimnasia deportiva y artística con el profesor ¨Luchy¨. Se convirtió en mamá joven, a los 16 años tuvo su primer hijo.

A María Elena le iba muy bien en sus estudios, siempre tenía buenas notas, y se encontraba entre las mejores estudiantes de su aula. Solía ser elegida la mejor compañera del curso. No tenía profes preferidos, pero si se llevaba muy bien y era querida por todos los docentes.

Siempre fue muy amable y tenía varios amigos, y la mayoría eran amigos del barrio I.N.T.E.V.U. N 10, donde vivía con sus padres y hermanos.

Se puso de novia con Marco Antonio Melián cursando la escuela secundaria. Y quedó embarazada a los 16 años, su primer hijo se llama Juan Manuel Melián, y a los 17 años tuvo a su segunda hija Erica. Abandonó la escuela secundaria cuando cursaba en el Centro Polivalente de Arte estando en 2do año del polimodal. La escuela secundaria la culminó de grande en el Cens. N 28.

Trabajó en el Comité Radical un tiempo, en fábricas como Mirgor, Samsung. Trabajó en investigaciones de la policía y en la Biblioteca Infanto Juvenil. Realizó cursos de Ayudante Terapéutica. Hizo pasantías en el Ministerio de Desarrollo Social en la sede Río Grande, ubicada en la calle El Puestero 50 del barrio CAP.

A los 22 años volvió a ser mamá con otra pareja, y tuvo su tercera hija que se llama Camila. En el 2011 tuvo a su cuarto hijo que se llama Daren.

A los 17 años, en su segundo embarazo le diagnosticaron diabetes gestacional. A partir de esa edad empezó a inyectarse insulina. Y con el tiempo se fue deteriorando su salud, María Elena padecía Diabetes tipo II.

En una oportunidad la operaron de la vista; la operación no salió bien. Y la terminó perdiendo completamente, de todas maneras, ya tenía la visión complicada.

Cuando se encontró ciega, se dio cuenta que no hay nada para las personas con esta problemática. María Elena expresó en una entrevista para el noticiero de Canal 13: ¨al principio uno está tan triste y perdido por no tener ningún tipo de contención más que la familia y se desconoce realmente cómo tratar a las personas ciegas, es difícil volver a levantarse y arrancar de nuevo¨.

Fue por ello por lo que cuando comenzó a quedarse ciega y después de varias operaciones en la vista que no mostraron mejorías en su visión, empezó a estudiar braille en la Escuela N 2. En apenas dos semanas ya sabía leer y escribir. Y cómo se dio cuenta de que nadie enseñaba braille, empezó a dictar talleres gratuitos del sistema braille en la Biblioteca Popular Kau-Kren. Dicho taller apuntaba a la inclusión de las personas ciegas dentro de la comunidad riograndense, como también así a toda persona que quiera acceder al aprendizaje de la escritura braille. Los Talleres que dictaba eran abiertos y gratuitos para el público en general y con entrega de certificados de asistencia. El Taller de Braille ¨Braille para incluirnos¨ dictado por María Elena se declaró de Interés Municipal, a través del concejal Alejandro Nogar.

Cuando fue abuela, en ese entonces ya no veía. Su nieta tiene hoy 3 años y un nieto que no conoció de 6 meses.

María Elena expresaba en un medio local respecto al taller que brindaba: ¨pensó en devolver y en hacer algo para que la sociedad lo aprenda, para que los no videntes puedan estar incluidos y que mucha gente que tiene que trabajar con ciegos sepa el braille y que no estén excluidos, y que puedan estar comunicados y no solamente verbal; que puedan presentar notas y que las notas se entiendan es muy necesario ¨.

María Elena formó una agrupación de personas no videntes, que lo hacían sin fines de lucro. Uno de los objetivos era informar a través de charlas abiertas sobre los no videntes y su realidad. En la agrupación planteaban las cosas que faltaban en la ciudad para personas no videntes o disminuidas visuales, ya que consideraban que no son incluidas y que transitar las calles o ingresar a oficinas a realizar trámites o ir al doctor no es seguro para las personas no videntes, por ejemplo: no hay semáforos sonoros.

Su objetivo que el sistema braille sea conocido por todos, para estar más incluidos. Con el fin de que mas personas supieran hablar y escribir braille, dictó charlas en el Colegio María Auxiliadora, dio charlas en las escuelas para que los jóvenes también se interesaran. Como así también docentes del Gabinete docente se mostraron interesadas en que María Elena diera charlas y enseñanza de braille a los docentes. También el municipio de Río Grande estaba interesado en poder incluir a María Elena para que dictara talleres a personal municipal. Con Martín Pérez, actual intendente de nuestra ciudad, y a través de María Elena se enviaban invitaciones con la transcripción en sistema braille.

Siempre le gustó salir a bailar y lo hizo inclusive ya estando ciega, salía con sus amigos. Participó de las reuniones de la Iglesia Hay Vida en Jesús.

Entre los años 2017- 2020 se realizó estudios para ver si era posible realizarle un trasplante de riñón y de páncreas. Viajaba cada 6 meses a Buenos Aires junto a su hija Erica. En los últimos 3 años de vida, María Elena iba a diálisis, ya que sus riñones le funcionaban un 20%; asistía a diálisis día por medio: lunes, miércoles y viernes. Iba a diálisis para hacer limpieza de las toxinas de la sangre y para que pudiera estar mejor.

María Elena Díaz fallece un 9 de septiembre de 2020.

La recuerdan con mucho cariño su madre Rosa, sus hermanos y sus 4 hijos Juan, Erica, Camila y Daren.